Ahora resulta, mis dones, que el “Tri” no cayó ante Brasil por maleta, sino porque –para variar-- nueve de los seleccionados tricolores son tan buenos como levantadores de tarro que como panbolistas...

Hoy ando panbolero, mis dones y me he puesto a reflexionar sobre la irregularidad, no como negocio que es la “patada gallega en México, sino de dos de sus más importantes exponentes de su inconsistencia

El trío más buscado en Azcapotzalco, mis dones, no graba discos, no ameniza fiestas ni lleva serenatas.

Nuestro país, mis dones, es el paraíso de los “influyentes”, donde cualquier hijo

Uno de los escándalos políticos más sonados de los últimos meses, lo protagonizó el Gobernador de Querétaro, don José Calzada Robirosa, al gastar un millón de pesos –del erario, desde luego, no de su bolsillo— en la foto “oficial”

Como pensábamos millones de dones que parecemos --pero no somos-- pendejos, lo esperado sucedió. Y muy pronto.

Aunque el Distrito Federal marca el paso en el país en cuanto a leyes que han modernizado y cambiado añejos usos y costumbres, es una entidad llena de contradicciones y se ha convertido en un Drácula político, mis dones.

¿Qué depara el futuro al Sindicato de Maestros, el gobiernista, no el que da clases a futuros guerrilleros? Lo mismo que al de petroleros hace veinticinco años, mis dones, cuando envalentonado después de “entambar” a “La Quina”, el hoy innombrable en los corrillos políticos, don Carlos Salinas, se dio cuenta de las trapacerías de su tocayo Jonguitud --hasta entonces líder máximo del SNTE-- y lo mandó al carajo.